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La logística alimentaria es un concepto mucho más extenso que la simple acción de trasladar un alimento desde su origen hasta su destino. Cuando vamos a comprar comida al supermercado no solemos ser conscientes de lo que hay detrás de cada fruta, verdura, carne, pescado o cualquier otro tipo de alimento. Para que todos estos estén a nuestra disposición hay una serie de procesos logísticos que nos permiten encontrarlos en los supermercados.
Este tipo de logística tiene como objetivo satisfacer la demanda en varios sentidos, como por ejemplo, en conseguir el producto adecuado, no solo qué producto, sino también la cantidad, o en transportarlo en el tiempo establecido al sitio correcto, garantizando la máxima calidad del producto.
ALMACENAMIENTO, ENVASADO Y EMBALAJE DEL PRODUCTO A TRANSPORTAR
Cuando se trata con productos perecederos, no perecederos y duraderos, el almacén debe tener en cuenta ciertos aspectos en concreto, de manera que cada una de las zonas que se vayan a dividir aseguren un emplazamiento adecuado para cada mercancía según su naturaleza.
Dentro de estos aspectos a considerar destacan el mantenimiento de una temperatura adecuada de conservación, una humedad relativa en relación con la temperatura previamente establecida, condiciones de etiquetado y embalaje propias y, sobre todo, una máxima higiene.
En cuanto al envasado y embalaje se refiere, cada uno contempla la normativa vigente específica del producto que debe contener, pero, en líneas generales, se debe tener en cuenta que, desde el punto de vista logístico, en alimentación esta parte es muy importante, ya que el envase y embalaje están en contacto directo con el alimento y sirve como contenedor del mismo, protegiéndolo y aislándolo así de cualquier contaminación, adulteración y deterioro. Es por eso que tanto el envase como el embalaje deben permanecer imperturbables desde su fabricación hasta su compra en el supermercado.
CONTROL DE TEMPERATURAS E HIGIENE
La cadena del frío es otro concepto fundamental de la logística alimentaria, mantenerla durante todo el proceso logístico es imprescindible.
Tanto en el transporte de la mercancía alimenticia como en el almacenamiento de esta, se debe adaptar sus instalaciones, procesos y elementos de mantenimiento para trabajar en ambientes de temperatura controlada, es decir, garantizar que la temperatura interior sea la adecuada y compatible para la conservación de los productos alimenticios que se están tratando.
No solo se debe adecuar la temperatura, sino que también se debe garantizar que esta se mantenga en todos los procesos de traslado de la mercancía de unas instalaciones y/o medios de transporte a otras, manteniendo así la cadena del frío.
De la misma forma, los receptáculos de los vehículos o contenedores deben estar siempre limpios para proteger de la contaminación los alimentos transportados y, en el caso de que los alimentos no sean envasados, el transporte de estos requiere que se lleven a cabo una limpieza y desinfección del mismo receptáculo o contenedor.
Cabe destacar que los productos para dicha limpieza y desinfección deben ser aptos para uso alimentario y el agua utilizada debe ser potable.
LA TRAZABILIDAD, ELEMENTO ESENCIAL DE LA LOGÍSTICA ALIMENTARIA
Aunque siempre y en todo tipo de transporte se debe garantizar la trazabilidad, en el caso del transporte de alimentos la importancia aumenta considerablemente dado que esta sirve para poder realizar un rastreo efectivo y rápido.
En el caso de que surja una alerta alimentaria o sea necesario efectuar una investigación por parte de las autoridades, la trazabilidad juega un papel fundamental en la seguridad alimentaria, es la que otorga la capacidad de retirar cualquier partida que pueda suponer un riesgo alimentario, independientemente de cuál sea la fase de distribución o producción en la que se encuentre.
En la industria alimentaria es esencial e imprescindible tener establecido un sistema de trazabilidad que garantice el rastreo de un alimento a través de toda la cadena de suministro.
TÉCNICAS FIFO Y FEFO
La técnica FEFO (First Expires, First Out) hace referencia al ciclo de vida de un lote, es decir, de su cercanía a su fecha de caducidad o consumo preferente.
Mientras que la técnica FIFO (First In, First Out) hace referencia a su fecha de entrada en las instalaciones.
Estas dos técnicas de gestión deben llevar una lógica, la que suele ser aplicar en primer lugar el FEFO, es decir, salen antes los lotes de fecha caducidad más próxima y, a igualdad de fechas de caducidad, salen antes las referencias más antiguas, siguiendo la técnica FIFO.
CORRECTA GESTIÓN DE RUTAS Y MERCANCÍAS
Una correcta gestión de rutas y mercancías diferenciará a una logística alimentaria eficiente y sostenible de otra que no lo es tanto como sería posible.
Evitar viajes con el camión vacío es una de las premisas más claras en este ámbito, junto con la planificación avanzada y la toma de decisiones en tiempo real. Todo ello contribuye a reducir costes y, sobre todo, a disminuir el desperdicio alimentario durante la logística.
EGLOBE, EXPERTOS EN TRANSPORTE Y LOGÍSTICA DE ALIMENTOS
En eGlobe somos expertos en logística y todo tipo de transportes, ya sean por vía terrestre, marítima o aérea.
Contamos con décadas de experiencia en el sector, transportamos sus alimentos, cumpliendo con el compromiso de un traslado perfecto hasta el destino, sin ningún tipo de daño ni desperfecto en la mercancía.
Además, ofrecemos una gran variedad de servicios concernientes al transporte, como podrían ser servicio de aduanas y toda su gestión, entre otros muchos.
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